El Síndrome de Intestino Irritable o SII es una afección del sistema digestivo que afecta de manera desigual a cada individuo, hay personas que experimentan síntomas verdaderamente graves de vez en cuando, durante días o incluso meses antes de disfrutar de alguna mejoría o incluso la desaparición temporal de todos los síntomas.
Síntomas del Síndrome de Intestino Irritable
Generalmente después de comer o beber:
Dolor abdominal y/o lateral-espalda
Exceso de gases
Diarrea o Estreñimiento
Heces con mucosidad
Necesidad de ir al baño con urgencia especialmente por la mañana
Sensación de no haber vaciado los intestinos después de usar el WC
Otros síntomas:
Dolor de cabeza
Náuseas
Indigestión
Ardor de estómago
Cansancio
Dolor de espalda
Eructos
Dolores musculares
Micción frecuente
Ansiedad
Depresión
Causas del Síndrome de Intestino Irritable
Nervios o Músculos Hiperactivos
La comida pasa por el sistema digestivo a través de las contracciones de los músculos que se encuentran en todo el recorrido que abarca el esófago, estómago e intestinos, cuando los nervios o los músculos se vuelven hiperactivos, dependiendo del lugar donde se produce el exceso de actividad, pueden causar problemas digestivos como estreñimiento y diarrea.
Los expertos no están seguros de cual es la causa pero una teoría popular es que las señales entre el intestino y el cerebro se interrumpen.
Algunas personas tienen una sensibilidad excesiva en la zonas nerviosas del recorrido digestivo lo que agrava los síntomas.
Intolerancias Alimenticias
Pueden ser responsables de que se desencadenen los síntomas del Síndrome de Intestino Irritable.
Gastroenteritis o Virus Estomacal
También se ha observado que el SII puede desarrollarse después de haber padecido una infección gastrointestinal por virus o por bacteria, ya que un crecimiento excesivo de las bacterias en el intestino también puede ser responsable de que aparezcan los síntomas de irritación intestinal.
La Causa Hormonal
Las hormonas pueden estar implicadas, ya que las mujeres son mucho más propensas a desarrollar y padecer de un intestino irritable, agravándose en época de sus periodos.
La Dieta
Hay ciertos alimentos que parece que pueden desencadenar los Síntomas del Síndrome de Intestino Irritable como:
La Cafeína
Las Grasas y Fritos
El Chocolate
El Alcohol
Los Productos Lácteos (especialmente la leche)
El Trigo
El Centeno
La Cebada
Legumbres (Frijoles)
Ciertas Frutas
Las Coles (repollo, brécol, coliflor)
La Cebolla
Las Bebidas Gaseosas
Consejos para Abordar los Síntomas del Síndrome del Intestino Irritable
Beber al menos 8 vasos de líquidos diarios
Ingerir alimentos ricos en fibra de forma gradual y sin abusar del salvado (integrales, frutas y verduras)
Diarrea
Beber al menos 8 vasos de líquido diarios y no más de 1 vaso de zumo de fruta al día
Reducir el consumo de cafeína
Reducir la ingesta de cereales integrales
Evitar el sorbitol y los edulcorantes artificiales
Probar con lácteos sin lactosa
Gases - Hinchazón abdominal
Disminuir y controlar el consumo de legumbres, frijoles, coles.
Sustituir los lácteos o consumir lácteos sin lactosa durante algunos días o semanas.
Dieta
Comer regularmente sin saltarse las comidas, controlar especialmente la ingesta nocturna.
Mantenga un cuadernillo con las anotaciones de cada alimento que ha tomado y la reacción en su organismo para consultar con el profesional de la salud y el nutricionista.
Nutrientes para Combatir el
Síndrome del Intestino Irritable
El Aceite de Menta
Se trata de un remedio tradicional muy popular en diferentes sistemas de medicina tradicional como la China, Ayurveda, etc...
El aceite de menta tiene acción antiespasmódica y puede ayudar a reducir la producción de gases en el intestino, así como aliviar y calmar el dolor en la pared intestinal.
Al parecer numerosas investigaciones sugieren que pudiera ser un remedio prometedor ya que se observan mejoras significativas en el dolor, la distensión abdominal, la flatulencia y la frecuencia de las deposiciones en aquellas personas que usan el aceite de menta.
FOS / Fructo-Oligosacáridos
Los Fructo-oligosacáridos son el alimento de las bacterias amigas de la flora intestinal, la evidencia muestra que alivian los síntomas. FOS es un tipo de fibra presente en alimentos como la raíz de achicoria y la cebolla. (Descubre 5 beneficios del FOS)
Control del Estrés
Según los expertos, el estrés y la ansiedad provocan la liberación de sustancias químicas que pueden afectar el sistema digestivo.
Al parecer las personas con Síndrome del Intestino Irritable pueden tener bajos niveles de serotonina, lo que puede tener un efecto negativo sobre el estado de ánimo.
Se cree que las personas que padecen de Síndrome de Intestino Irritable han podido padecer algún tipo de evento estresante durante la infancia, lo que habría generado una mayor sensibilidad al estrés y a los espasmos abdominales.
Aprender a gestionar la respuesta del organismo al estrés podría proporcionar alivio; la terapia de relajación, la acupuntura, el yoga y cualquier otra técnica de relajación y de gestión de los nervios puede ayudar muy mucho en estos casos.
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