Deficiencia de Vitamina D Enfermedad Autoinmune y Esclrerosis Múltiple

Algunas investigaciones sobre la vitamina D han desvelado la influencia de esta vitamina en unos 200 genes como los asociados con la esclerosis múltiple, la enfermedad de Crohn, la diabetis tipo I, cáncer y otras enfermedades autoinmunes.

Según el estudio realizado por un equipo de investigadores del Reino Unido y publicado en Genome Research. El doctor Sreeram Ramagopalam de la Universidad de Oxford y principal autor de la investigación, el descubrimiento demuestra "la gran importancia que tiene la vitamina D para los humanos y la amplia variedad de circuitos biológicos en los que juega un papel relevante".  

A su juicio, estos hallazgos respaldan la hipótesis de que la vitamina D interactúa  con los genes en la patogénesis de estas enfermedades y subraya que los riesgos que conlleva la escasez de esta vitamina, sobre todo en individuos con predisposición genética a ser sensibles a la carencia de esta. Por ello considera " muy recomendable" tomar suplementos de vitamina D como medida de prevención frente a estas enfermedades.

Con respecto a la esclerosis múltiple los estudios mostraron que tener bajas cantidades de vitamina D en la juventud está directamente relacionado con una mayor incidencia de esclerosis múltiple en portadores del virus Epstein Barr,  en años posteriores a lo largo de su vida.

La vitamina D previene la inflamación crónica y el desarrollo de ciertas enfermedades como consecuencia de la inflamación.

Podemos obtener vitamina D, de la luz solar (una exposición de unos 20 minutos diarios), la alimentación y los suplementos dietéticos. Según un estudio llevado a cabo por The centers for desease control and prevention recogido por el National Health and Nutrition Examination, el 40 % de los hombres, el 50 % de las mujeres y el 70% de los niños Americanos tiene bajos niveles de vitamina D. 

Se cree que esto es debido a las dietas basadas en comidas procesadas que aportan muy poca vitamina D, en contraposición a los alimentos frescos no procesados (por esta razón muchos alimentos refinados como los cereales del desayuno tienen que enriquecerse por la industria alimenticia con vitamina D, compruebe en los envases) y al intento de la población por prevenir el cáncer de piel evitando la exposición a la luz solar.

Algunos alimentos ricos en vitamina D son: El salmón, el caviar, las ostras, sardinas, atún, los cereales sin procesar, la leche, el zumo de naranja, las setas, el aceite de hígado de bacalao, el huevo etc.

Se estima que unas dosis adecuadas de vitamina D en la población adulta sería de 400 UI (unidades internacionales) al día y en menores de 18 años unas 200 UI diarias.

Bibliografia: "The Wellcome Trust Centre for Human Genetics"